ANDRÉS TIMOTEO
CABAÑUELAS 2022
Lavar por encima. Se lee en los primeros boletines girados. De madrugada, lavaron zócalos y calles aledañas a los palacios municipales. Escoba y manguera en mano, los empleados refregaron el suelo antes del amanecer. Fue la primera disposición de los nuevos ediles. Así se vio en Córdoba y el puerto de Veracruz dando a entender que los alcaldes salientes, Leticia López y Fernando Yunes, tenían un cochinero que debía ser aseado.
En algunas calles y colonias se recolectó la basura que durante las últimas semanas estuvo acumulada formando cerros malolientes. El municipio ícono en el asunto basuresco es Medellín de Bravo donde la primera acción del edil Marcos Isleño fue alquilar vehículos recolectores para terminar con la venganza de su antecesor , el panista Hipólito Deschamps, hacia los habitantes de las colonias y congregaciones donde perdió en los comicios pasados.
Bien que los ediles entrantes usen el agua, el jabón y la escoba. Lo malo es que se antoja como un mero acto cosmético. La verdadera limpieza tendrá que hacerse en los libros contables y los reportes de las cuentas públicas pues ahí está la zahúrda más grande y hay muchos cerdos que deben ser enchiquerados. Lavar por encima es, hasta el momento, teatralidad demagógica.
Cordovirus. En Córdoba se quebraron la cabeza los que diseñaron el logotipo del ayuntamiento. Éste merece un premio a la pereza mental. Al nombre de la ciudad, le sustituyeron la “O” por una bola crestada que hace recordar al Coronavirus, causante de la pandemia que tiene a todos bajo el terror y la calamidad. ¿Será una premonición sobre lo que provocará el gobierno del morenista Juan Martínez Flores en la Ciudad de los Treinta Caballeros?
Imperator ficto. Le gusta que le llamen emperador, admira al dictador Porfirio Díaz y lleva gobernando quince años la aldea. No tiene trato fino ni la sensibilidad de un humanista, pero es buen administrador y ha conducido a Orizaba al progreso aun apaleando a los más desprotegidos. Juan Manuel Diez inició su quinta alcaldía, la tercera como titular -pues en las dos anteriores tuvo como prestanombres a Hugo Chahín e Igor Rojí- y al final completará casi dos décadas como cacique de pueblo…mágico.
Aún así, hoy por hoy su gobierno es el que más expectativas positivas genera. El mismo Diez Francos está entre los que se mencionan para alguna candidatura en el 2024, incluyendo la de la gubernatura. El alcalde orizabeño es un genuino sobreviviente del proceso de extinción de la fauna priista tras los meteoritos electorales que impactaron en el 2016, el 2018 y este 2021. Por eso le acomoda más el apodo de ‘Tiranosaurio Rex’ que el de ‘Imperator ficto’ -falso emperador-. Ahora que lidie con los primates de la “cuarta transformación” se verá si el dinosaurio termina o no en lagartija apedreada.
MÁS DE LO MISMO
Contra Einstein. En Veracruz y Boca del Río, los alcaldes panistas Patricia Lobeira y Juan Manuel Unanue se declaran enemigos de Albert Einstein quien dijo que “si quieres obtener resultados diferentes, no hagas siempre lo mismo”. Ambos integraron sus organigramas con los mismos personajes de siempre -los que ya estuvieron en los ayuntamientos salientes o en otras administraciones -y algunos de ellos tienen cuestionamientos severos en su honestidad como Abel Cuevas, el nuevo tesorero de la comuna boqueña que está inhabilitado por la Contraloría estatal. ¿Cómo van a limpiar el mugrero que les dejaron si emplean a tanto ‘cartucho quemado’?
La magia pellicana. Ni una palabra del nuevo alcalde de Ixtaczoquitlán, Nahúm Álvarez Pellico sobre la crisis de seguridad y violencia en el municipio. Nada sobre su regidor Roberto Trinidad de la Cruz detenido por ordenar el asesinato del periodista Jacinto Romero Flores. Cero alusión a eso de pacificar el lugar y esclarecer las desapariciones de personas. Lo que denunciaba en campaña desapareció por arte de magia el día de su asunción al cargo. Ahora resulta que en Ixtaczoquitlán todo es tejer y cantar. Las víctimas perdieron al que prometía ser su justiciero y el edil saliente ganó un aliado-tapadera.
Pitonizo chafa. No se cumplió el pronóstico del secretario de Gobierno, Patrocinio Cisneros de que la renovación de los poderes municipales se realizaría de forma tersa, tranquila y que todo sería como saborear unas hojuelas azucaradas. Fue lo contrario: quince asesinatos violentos, dos feminicidios, dos policías asesinados en Cerro Azul y en Soconusco un atentado contra el alcalde electo, Cuauhtémoc Baruch de Morena. ¿Cuál miel sobre buñuelos?
Engrudo en bolas. En Lerdo de Tejada, Ángel Vichi, alcalde sustituto fue detenido antes de tomar posesión. Es el segundo al hilo pues a inicios de diciembre, Fabián Cárdenas, el titular de la formula también fue capturado por delincuencia organizada. Ambos son cercanísimos al diputado tuxtleco, Javier Gómez Cazarín y a la fiscala, Verónica Hernández.
Aun cuando la ley establece ante la ausencia permanente del edil y su suplente se debe nombrar un concejo municipal y convocar a elecciones extraordinarias, el congreso local volvió a atropellar el marco constitucional a recurrir a la prelación de cargos y hacer que rindiera protesta la síndica Esther Arroniz como “alcaldesa provisional”, cargo inexistente. En en Lerdo de Tejada, al cuitlahuismo ‘se le hizo bolas el engrudo’ por las personas que Morena postuló para la encomienda municipal pues resultaron tremendos delincuentes.
CHACHALACA REMIX
Antes de dejar el cargo, el alcalde morenista de Atlacomulco, en el Estado de México, Roberto Téllez Monroy, mandó a colocar una estatua del caudillo en el poder Andrés Manuel López Obrador pero la derribaron los priistas de esa tierra caciquil. Además le cortaron la cabeza. Lo mismo pasó hace 14 años en Boca del Río cuando otro edil barbero, el panista Francisco Gutiérrez de Velasco colocó una estatua del entonces expresidente Vicente Fox sobre el bulevar costero.
El 13 de octubre del 2007 una turba de priistas lazó con cuerdas la efigie, la tumbó y la arrastró. También le cercenaron una mano y le bailaron encima. Pero lo grave de Atlacomulco no es el agravio contra la piedra sino lo que presagia pues así como acabó Fox – “La Chachalaca”, como lo apodaba el tabasqueño- por lo suelos y encarnando la decepción popular por el falso cambio político, así podría terminar López Obrador.