TEXTO IRREVERENTE

Por Andrés Timoteo

CARNAVAL VERANIEGO

Los humores, malos o buenos, tiene un desfogue en pleno verano. Ya comenzó el Carnaval de Veracruz en un año desacostumbrado pues se alteró el calendario judeocristiano que lo ubicaba antes de la llegada de la primavera para coincidir con la víspera de la Cuaresma. La pandemia de Covid-19 así obligó y su sello estará presente, no con medidas sanitarias – ¿cómo imponerlas a la turbamulta? -, sino en lo símbolos pues el Mal Humor de este año se vistió de ese virus gripal.

Anoche, el Coronavirus ardió en la Plaza de Armas para marcar el arranque de la fiesta y como una suerte de castigo popular al microbio que durante dos años torturó y diezmó a la humanidad, jarochos incluidos. Es, por supuesto y como ya se ha dicho, un carnaval inédito. Por ejemplo, los que serán coronados como Reina de la Alegría y Rey Feo ya no son lectores de noticias en las televisoras locales ni locutores de radio ni parientes o allegados de políticos, ahora son ‘influenciadores’ de la redes sociales. Una tal Yerania y un tal “Papanatas”.

¿Qué se sienten hechos a mano? Sí, lo mismo que los anteriores. ¿Qué amenazan hasta con no asistir a las coronaciones si no les ponen guardaespaldas personales y les cumplen otros caprichos? También, pero eso lo contesta la propia sabiduría popular: no tiene la culpa el indio sino el que lo hace compadre. Ni modo, hay que aceptar los nuevos tiempos, la irrupción de estos personajes en el ánimo popular y lidiar con ellos porque son talentos de opereta, nada serios y por lo tanto ideales para la pachanga carnavalesca, pues.

No obstante hay que aclarar una cosa, el Carnaval de Veracruz es mucho más que esos ídolos de la aldea cibernética por muchos millones de seguidores que estos presuman. La fiesta es legendaria y ha sido popular mucho antes de que esos personajes nacieran. Hay que aprovecharlos como camino para la difusión mediática, pero en ningún momento y por ninguna circunstancia el festejo es de ellos ni de depende de ellos para realizarse y ser lo que es. Ellos son coyunturales nada más. Hoy están en el candelero, mañana ya no, pero el Carnaval de Veracruz ahí seguirá.

Resumiendo, la importancia es el carnaval, la fiesta, no los “monarcas” de ocasión. En fin, serán nueve días de relajo y desparpajo. Hay que aprovecharlos para reírse de uno mismo. En eso consiste darle obediencia al Bando Solemne de Juan Carnaval, espantar lo que incomoda y hacer posible la catarsis social, política, familiar, sexual, religiosa y -¿por qué no? – hasta cultural y la que tiene que ver con el buen gusto. Ah y en este  Carnaval de Verano para completar lo desacostumbrado está la quiniela de que si el gobernante estatal acude a los desfiles en tierras de dominio yunista.

No coronará a los reyes, como era la vieja costumbre, pero ahora que desde palacio de gobierno se pregona la civilidad, el morbo político -otro ingrediente infaltable en la pachanga carnavalesca -es sobre su asistencia o no al desfile magno del domingo, aunque se repite que el Carnaval de Veracruz es mucho más que los personajes veleidosos y si Cuitláhuac García asiste o no da igual pues de todos modos los jarochos se divertirán. El gobernante es de turno, parte de la coyuntura paralela.

NI UN LITRO

A nivel nacional también habrá chunga veraniega pues hoy viernes el presidente Andrés Manuel López Obrador inaugurará la refinería de Dos Bocas en Tabasco al cumplirse ya cuatro años de su triunfo electoral del 2018. Bueno, eso de inaugurar es un decir porque solo serán algunas oficinas y el complejo no estará funcionando sino hasta el 2026  cuando comenzará a producir combustible, según los expertos.

Todo es parte de la opereta lopezobradorista pues el tabasqueño pone a “funcionar” una refinería que no refina, igual que rifó un avión que nunca fue rifado e inauguró un aeropuerto que pocos utilizan, que solo tiene vuelos simbólicos. Todo es decoración, aunque muy cara.

A los mexicanos les cuesta demasiado  esos caprichos presidenciales que son, hasta el momento, tremendos ‘elefantes blancos’.  Dos Bocas ya elevó su costo de 8 mil a 12 mil millones de dólares y para finales del 2025 éste se ubicaría en los 18 mil millones de dólares. ¡Y sin producir un solo litro de gasolina! ¿A poco no es un vodevil digno de carnaval?

BORRACHAZO

¿Se acuerdan de Camilo Barrera que no entendía razones andando en la borrachera? Pues así están el gobernante en turno Cuitláhuac García y su secretario plenipotenciario Patrocinio Cisneros, ebrios de poder, en especial con el juguillo de la procuración de justicia que les sirve para encarcelar a los incómodos. Son varios los presos políticos consecuencia de tal francachela, aun cuando algunos han recuperado la libertad por intervención del poder judicial de la federación.

El que hoy ocupa la marquesina es Pasiano Rueda, el militante del Partido del Trabajo (PT) que ganó dos veces la alcaldía de Jesús Carranza, en el sur del estado, una de ellas desde prisión. Rueda debería tomar posesión del cargo este viernes, pero no lo hará porque el cuitlahuismo lo tiene en una mazmorra desde hace nueve meses, castigado por desafiarlo y derrotarlo.

Las acusaciones penales en su contra son fabricadas, aseguran sus abogados y familiares, como en los otros caso de presos políticos. Pese a ello, ya no hay tiempo y no será alcalde, el congreso llamó al suplente, Enrique Cruz, a quien también persiguen judicialmente. Hay versiones que lo detendrán apenas aparezca y otras que, ‘a posteriori’, desaparecerán poderes de Jesús Carranza.

Es parte del manual ya ensayado en Mixtla de Altamirano y Actopan, descabezar a los titulares, imponer concejos municipales o títeres en las oficinas municipales para controlar a la mala la administración -y, claro, su presupuesto -. Todo apunta a que para allá se dirige Jesús Carranza. Es la inercia con estos dos personajes, García y Cisneros,  intoxicados con el poder aldeano y que en esa farra desorbitada gustosos retuercen la ley.

¿Hacerlos entender?, pero si están peor que Gabino Barrera y que Pancho Rivera, sí aquel que traía el calzón chamagoso y la camisa de fuera. “Borracho hasta espanta/ mejor ni lo veas./ Todos en el pueblo le sacan la vuelta/ es muy peligroso por su lengua suelta”, así dice el corrido y así sucede con este par. Risas.