Contrapunto

Miguel Ángel Gómez Ruiz

Nada en Morena es verdad

Muchos mexicanos decidieron dar el voto a Morena en 2018 pensando, quizás, que serían diferentes. No era cierto.

De hecho, muchos mexicanos, adultos mayores, mujeres viudas, jóvenes y estudiantes de distintos niveles recibieron apoyos de parte del gobierno, apoyos que paulatinamente está desapareciendo pues los lujos de los integrantes de Morena, son muy caros.

Navegaron por mucho tiempo con bandera de austeros, pero están enamorados del neoliberalismo, ese que les permite viajar a Europa, Estados Unidos, Sudáfrica, Nueva Zelanda y alguna otra maravilla, siempre y cuando no sea viajar hacia Cuba, Venezuela o Colombia, no, esos países no pese a que portan banderas de izquierda.

Pero hay que ser objetivos, todo comenzó mal desde que el presidente López asumió el cargo, gobernó -muchas veces- con el pie antes que con la cabeza, tuvo malos funcionarios, la epidemia del Covid-19 fue terrible pues mostró las graves deficiencias de un sistema de salud que desde que ellos asumieron el poder, se vino abajo estrepitosamente.

El entonces presidente quiso castigar a las empresas farmacéuticas del país, compró o mendigó por vacunas de pésima calidad como las rusas, las cubanas y nunca pudo mostrar la suya, es decir, desde hace casi cuatro años no han podido culminar la fabricación de la vacuna Patria y mucho menos probarla si es que hay algún valiente que quiera hacerlo.

Hubo malos gobernadores, desde Cuauhtémoc Blanco, Cuitláhuac García, Rubén Rocha Moya y otros de los que ni recuerdo sus nombres, pero sí casos graves como Colima, Sonora, Zacatecas, Tamaulipas, Michoacán y Guerrero, que han sido un desastre, un auténtico desastre.

Malos alcaldes, malos diputados locales y federales, malos senadores y malos auxiliares tanto en dependencias federales y estatales. Malos fiscales, malos policías y así, la telaraña se ha vuelto muy larga y ellos solos se cubren.

Al final, los perjudicados han sido los ciudadanos, muchos de ellos confiaron que saldrían ganando, pero hoy vemos que en Morena muchos cargos fueron repartidos a expriistas y expanistas y ni siquiera a aquellos que estuvieron cerca y que pelearon por el bien del partido y del país les han tomado en cuenta, es decir, los hicieron a un lado.

Hemos visto a mujeres morenistas viajar con su familia en aviones oficiales, a una senadora fumarse su carrujo, a otras hablando pestes de sus seguidores, a diputados aprobar tonterías, funcionarios utilizando o permitiendo utilizar edificios públicos para alabar a líderes de la Luz del Mundo o bodas entre homosexuales, gobernadores devolviendo dinero y en lugar de hacer obras, contribuir para ganar votos, diputados que apenas saben leer aprobando leyes y reformas que perjudican a México y en fin, eso seguirá si nosotros, los mexicanos, lo permitimos.

Lo peor de lo peor es que pareciera que la presidente, gobernantes y demás siguen consintiendo y obedeciendo a un individuo que mal gobernó al país o bien, que siguen empecinados en poner trabas a aquellos que no están de acuerdo con su forma de actuar. Si es así, seguiremos jodidos por mucho tiempo.

Es muy grave que no haya una oposición seria, que más bien, por lo menos los que tienen cargos públicos se dejen intimidar por un gobierno nefasto, que les amenaza con denunciar y encarcelar. Peor es que algunos de esos actores que navegan con bandera de oposición sí tengan cola que les pisen, lo que acrecienta el temor de que Morena -lo peor que le ha pasado a México- siga haciendo de las suyas.

Por ahí leí una reflexión de un periodista que tiene mucha razón y es el hecho de que los morenistas siempre criticaron que otros tuvieran privilegios y no lo reclamaron por el país, si no por ellos mismos pues son ahora los que tienen privilegios y los mexicanos, muchos, siguen dormidos y jodidos.

Pantomimas

Hace unos días fue asesinado el diputado federal del Verde Ecologista, Benito Aguas y los morenistas, con sus aliados, pusieron el grito en el cielo. Lamentaron el horrible crimen y exigieron justicia, olvidando quizá que ha habido cientos de miles de mexicanos que murieron de Covid-19, asesinados y hasta otros que han muerto de hambre.

A su velorio asistieron unos cuantos y anoche, en la Ciudad de México el reclamo de justicia quedó olvidado, muchos fueron a su posada, a disfrutar de las mejores viandas, las mejores bebidas y quizá uno que otro se fue de allí a seguirla pasando bien, pero la muerte de Benito Aguas quedó en el olvido, así de simple.

PD El coordinador de la bancada del oficialismo en la Legislatura de Veracruz, Esteban Bautista, ya se enteró que hubo un grave dispendio de recursos en ese lugar, muy parecido a la Subsecretaría de Finanzas de donde salen recursos hasta para el pago de gimnasios, vehículos y hasta para la lavandería de los oficialistas. El responsable sería el diputado Juan Javier Gómez Cazarín que podría -si realmente hay justicia- ser encarcelado e inhabilitado por mal manejo de recursos públicos, recursos que fueron a parar a medios de comunicación creados allí mismo o bien, para reporteros -más bien, tundeteclas- que se aliaron al sistema para que les pagaran sus comilonas y borracheras. Así.