TEXTO IRREVERENTE/ ANDRÉS TIMOTEO
INACCIÓN ABSOLUTA
En el asesinato del extrañado Miguel Ángel López Velasco no hubo investigación ministerial seria, imperó la burocracia, la falta de voluntad política para esclarecerlo y tanto la Fiscalía General de la República (FGR) como la fiscalía estatal mostraron una “inacción absoluta”. Concatenado a ello, lo que agrava el tratamiento judicial del homicidio es que en los expedientes ministeriales jamás incluyeron el trabajo periodístico de Milo Vela como el móvil que detonó el ataque.
Tal fue la deducción tras los dos días de audiencias que celebró el Tribunal de lo Pueblos para Asesinatos de Periodistas en la Ciudad de México y cuyos integrantes – diez jueces y una fiscal – se dijeron sorprendidos: “hemos escuchado una letanía de horrores” de lo que pasa en México y en especial de Veracruz, y respecto al crimen de Milo Vela, su esposa Agustina Solana y su hijo Misael López Solana hay “una combinación de falta de voluntad política, corrupción, complicidad e impunidad al grado de que (a once años) la justicia no es capaz de pronunciarse”.
No hay conclusión de las investigaciones ni mucho menos detención ni castigo a los responsables. La prueba fehaciente de lo anterior es que a más de una década “ni la FGE ni la Fiscalía del estado no han siquiera identificado ni investigado -ni castigado – al autor intelectual del asesinato de Milo Vela”, fustigó Balbina Flores, corresponsal en México de Reporteros Sin Fronteras (RSF) quien conoció del caso desde el principio y ha acompañado a sus deudos y a la comunidad reporteril veracruzana a lo largo de lo últimos años.
Ya en víspera, el martes, cuando iniciaron las audiencias, la extitular de la a Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE) Laura Borbolla reconoció que “había mucho desaseo” de parte de las autoridades de Veracruz en el rubro de las investigaciones e incluso los integrantes del organismo a su cargo recibieron amenazas y un “ambiente hostil” cuando la federación intervino para realizar diligencias en territorio veracruzano.
Sin embargo, los dichos de Borbolla fueron desmontados por Balbina Flores, no en cuanto a la hostilidad del gobierno duartista sino porque la FEADLE en estos once años “se la ha pasado enviando y recibiendo oficios, pero no se conocen diligencias que hayan hecho en Veracruz, no se conoce investigación alguna”, acusó.
“El expediente de Miguel Ángel López Velasco y su familia sigue abierto por una imple y sencilla razón: porque no hemos dejado que se cierre. Dicen que la averiguación está parada porque no hay nuevos elementos, pero ¿cómo van a encontrar nuevos elementos si no investigan?, cuestionó irónicamente.
– ¿Hubo voluntad política del Estado mexicano para prevenir las agresiones a los periodistas y castigar a los autores de esos ataques?, preguntó uno de lo jueces. “ Voy a ser dura: no. Si hubiera voluntad política no estuviéramos aquí en este tribunal”, respondió la activista. La “inacción absoluta” de la que habla Balbina da como resultado la “impunidad perpetua” que ha denunciado durante años RSF sobre la situación de los periodistas en México.
A once años de aquel crimen que sacudió a la comunidad periodística y desató los asesinatos de comunicadores “el miedo en Veracruz para hacer periodismo no ha desaparecido”, añadió Balbina y aunque no hay reparación que valga en el caso de Milo Vela, lo menos que se puede hacer es “parar con la criminalización de quienes ya no se pueden defender”, expuso. Esto porque enlodar a las víctimas, y sobre todo si son reporteros, ha sido la constante de los funcionarios públicos.
VERACRUZ-LA HAYA
En el segundo día de audiencias del Tribunal de los Pueblos comparecieron los hijos sobrevivientes de don Milo Vela, Jazmín y Miguel Ángel López Solana, este último pisó suelo mexicano tras diez años de estar refugiado -primero- y asilado -después- en los Estados Unidos. Fue dramático el testimonio de los hermanos. “Justicia es lo que necesitamos, que se acaben las lágrimas”, dijo Miguel Ángel Jr. “Y que se limpie el nombre de los periodistas caídos, de todos no solo el de mi padre”, exigió Jazmín.
Al concluir la audiencias, el jurado dirigió un mensaje resumiendo: “conocíamos la situación de México, habíamos leído y estudiado lo que pasaba, pero lo que escuchamos aquí es dramático. Pudimos medir la profundidad y la gravedad de la situación de los periodistas, hay una impunidad casi total en los crímenes contra los periodistas. Es un panorama oscuro”.
Antes de dar por clausurada la sesión, el juez secretario del panel Gianni Tongnoni anunció que el cierre del proceso judicial que desahoga el caso de Milo Vela y los de los periodistas Lasantha Wickrematunge y Nabil Al-Sharbaji de Sri Lanka y Siria, respectivamente, será en una asamblea simultanea que se efectuará el próximo 20 de junio en el puerto de Veracruz y La Haya, Holanda.
Por cierto, ni el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ni el de Cuitláhuac García enviaron a un representante legal para fungir como abogado defensor en la audiencia y ni siquiera aportaron un posicionamiento escrito, lo que demuestra la nula importancia que el dan al caso por el cual es juzgado el Estado mexicano y retrata, en general, su desinterés para esclarecer los crímenes contra los periodistas.
REGINA, DIEZ AÑOS
Hoy se cumplen diez años de que la querida Regina Martínez fue atacada y asesinada en su vivienda de Jalapa. Fue la tercera periodista victimada después de Milo Vela pues en ese lapso de diez meses también privaron de la vida a Yolanda Ordaz, en julio del 2011, y Gabriel Fonseca, desaparecido en septiembre del 2011, aunque su cuerpo se localizó en una fosa clandestina hasta el 2015.
Igual al de Milo Vela, el crimen de Regina Martínez sigue en la impunidad perpetua pues hubo una conjura de Estado para enlodar a la víctima, recurrir a ‘chivos expiatorios’, manosear los expedientes ministeriales y proteger a los autores intelectuales. Ya pasó una década con la investigación archivada. Ante eso, lo que resta es mantener la terca memoria.
Como fue el grito al cierre de las audiencias del Tribunal de los Pueblos : ¡Justicia! Para ella como para don Miguel Ángel, para Misael y para doña Agustina, y para los demás colegas abatidos y desaparecidos. ¡Justicia, justicia, justicia!