Con pancartas con mensajes como “Ni una más” “Vivir sin miedo” y “ El grito de las que ya no están”, las mujeres partieron del parque Zamora de Veracruz, avanzaron por la avenida Díaz Mirón, siguieron por Bolívar y culminaron en la Antimonumenta en la Plaza de la Soberanía.
Para concientizar sobre los feminicidios diarios en el país hicieron un performance para mostrar las once mujeres que a diario pierden la vida en manos de feminicidas en el país
”Esas mujeres no están muertas porque yo estoy aquí por ellas, esas mujeres no están muertas porque tu estas aquí por ellas”, señaló una de las integrantes de la colectiva al exigir a las autoridades justicia y no ver a las víctimas como un simple número.
Con ropa morada y negra, pañuelos verdes, las mujeres exigieron el respeto a los derechos de las mujeres.
En la plaza escribieron con aerosol los nombres de presuntos violadores.
En Xalapa, las mujeres caminaron en grupo, con amigas, compañeras o vecinas sobre la avenida Ávila Camacho al punto de reunión con gorros, gorras y sombrillas que al paso de las horas se hicieron innecesarias.
«Una se vuelve feminista con su propia historia», «Sufre mamón, devuélveme a mis chicas», «No nací mujer para morir por serlo», «Por aquellas voces que ya no se escuchan», eran apenas algunas de las leyendas que se leía en algunas de las pancartas.
Desde ayer, varios comercios del centro de la ciudad fueron blindados para evitar ser vandalizados como ha ocurrido en otras protestas y desde temprana hora se instaló un fuerte dispositivo de seguridad en Palacio de Gobierno y la Catedral Metropolitana de Xalapa.
«Porque vivas se las llevaron, vivas las queremos», «El que no brinque es macho», «tranquila, hermana, aquí está tu manada», «me cuidan mis amigas, no la policía», «somos malas, podemos ser peores», «no somos una, no somos 10, pinche gobierno, cuéntanos bien», gritaron una y otra vez mientras la batucada sonaba con todas sus fuerzas.
Casi al llegar viaducto, con el puño arriba, uno de los contingentes empezó a cantar: «Que tiemble el Estado, los cielos, las calles; que tiemblen los jueces y los judiciales hoy a las mujeres nos quitan la calma, nos sembraron miedo, nos crecieron alas. A cada minuto, de cada semana, nos roban amigas, nos matan hermanas, destrozan sus cuerpos, los desaparecen. No olvide sus nombres, por favor, señor presidente».