Miguel Ángel Gómez Ruiz
México es un país con 130 millones de habitantes según cifras proporcionadas en 2024.
Lo grave no es que tenga tantos habitantes y una tasa de natalidad alta, sino que casi 50 millones de sus habitantes viven en la pobreza.
De 2018 a la fecha, según cifras otorgadas por distintas organizaciones, 5 millones de mexicanos se adhirieron a esa pobreza, es decir, sin oportunidades de laborar y de acceder a servicios básicos, como la educación y la salud.
Peor es la situación para los habitantes de zonas indígenas, pues esa población tiene menores oportunidades de acceder a esos servicios y más a un trabajo estable.
Los gobiernos no han sabido darle solución a este problema y esa gente se queda sin la menor oportunidad para destacar de alguna forma. Más grave es que no hayan, por ejemplo, maestros y doctores para ir a esas zonas.
En el gobierno anterior, se determinó otorgar apoyos, como una pensión a adultos mayores que no tuvieron oportunidad para acceder a una vida laboral con prestaciones. El recurso se otorgó a un pequeño sector de pobres en el país, pero también accedieron maestros jubilados, maestros en activo, notarios, ingenieros y extrabajadores que ya gozaban de una pensión, lo que complicó que en el programa se ampliara el recurso para los que menos oportunidades tuvieron.
Más grave fue el asunto para personas que vivían en zonas indígenas o comunidades lejanas sobre el acceso a la salud. La falta de médicos y medicamentos ha sido evidente estos últimos años y eso acrecentó la problemática para esas personas, pobres y enfermas.
Durante estos últimos años ha habido muchos discursos, pero los resultados han sido pírricos. No hay una solución a fondo y los pobres siguen allí y seguirán pues no son prioridad para este gobierno.
México es gobernado por la izquierda en el país que sumó adeptos justamente porque se les dio recursos económicos a un sector, sin trabajo y sin estudios, pero con la edad suficiente para votar.
A ello hay que sumar que ante la falta de oportunidades, un sector de la gente en comunidades se adhiere a grupos del crimen organizado o bien, disponen de sus tierras para la siembra de droga.
Porque a todo lo expuesto hay que sumar la extorsión a gente del campo, asesinatos, ejecuciones y secuestros, lo que hace más dramática la situación para los que menos tienen.
México tiene como vecino a Estados Unidos y ahora ya no es tan fácil ser invadido por centroamericanos y sudamericanos para pasar hacia ese país, vigilado por miles de soldados estadunidenses y mexicanos, pues esa fue una condición impuesta por el actual presidente Donald Trump.
Lo cierto es que México es el cuarto país más pobre de la región del centro y sur, a la par de Honduras, Colombia y Argentina.
Alguna estrategia se tendrá que emplear, ya que el número de pobres seguirá aumentando y más aún porque un buen número de empresas en el país han cerrado sus puertas, lo que indica que el gobierno mexicano recibirá menos impuestos y será más propicio que se endeude a fin de subsanar algunas necesidades, pero no la de todos los pobres.