En una postura firme y crítica frente al reciente proceso de elección popular de ministros de la Suprema Corte de Justicia, la diputada Montserrat Ortega presentó una iniciativa de reforma constitucional que busca declarar inválidas dichas elecciones si no participa al menos el 40% de la lista nominal de electores.Durante su intervención, la legisladora denunció una serie de irregularidades en el nuevo modelo de elección directa impulsado por el gobierno federal, el cual —sostuvo— ha significado el desmantelamiento del Poder Judicial y la pérdida de independencia en la impartición de justicia.“Desde que se propuso que la conformación del Poder Judicial se haría por medio del voto popular, advertimos que esto representaba el desmantelamiento de las instituciones del Estado. La democracia directa, más que fortalecer, permitió la manipulación del proceso por grupos ajenos a la legalidad”, señaló ante el pleno.De acuerdo con la diputada, el proceso electoral estuvo plagado de irregularidades, como la entrega de “acordeones” con listas de candidatos afines al gobierno, “En lo que menos creen es en ese pueblo bueno y sabio, más bien creen en la rapiña y sin decoro y cinismo imprimieron acordeones” señaló; a su vez el uso de programas sociales como mecanismo de presión hacia los votantes y una serie de prácticas que vulneraron la libertad y el secreto del voto.“Fue un fraude electoral de grandes proporciones. No hubo libertad ni secreto: se amenazó a la ciudadanía y se repartieron listas para condicionar el sufragio”, denunció. Asimismo, criticó que, a pesar del intervencionismo gubernamental, apenas el 13% del padrón electoral participó, es decir el 87% de la población se abstuvo de participar al que calificó de gran fraude lo que consideró una muestra del rechazo ciudadano.“De ninguna manera puedo estar de acuerdo en que se valide un proceso electoral plagado de irregularidades que rompe con los principios que rigen en materia electoral y que ha servido para imponer a los incondicionales de la 4t que de ningún modo garantizan ni imparcialidad ni justicia pronta y expedita para los justiciables el asunto es tan desastroso y tan vergonzante que se volvió un escándalo internacional” manifestó.La legisladora calificó de desastrosa su reforma judicial “Fue desastroso como palomearon y excluyeron a gente preparada con su método que acaba con la meritocracia y vuelve todo en un círculo de Tómbola, luego para terminar de amañar un proceso y burlarse de la Democracia hicieron como seguro hacían muchos en la escuela para aventajar al más listo, usaron acordeones, y como no estaban muy cercanos los que ellos querían que ganaran el primer lugar, en Veracruz hasta se cayó el sistema de manera por demás descarada fuera de toda legalidad”.La legisladora también citó el informe de la Misión de Observación Electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA), que documentó estas prácticas e hizo señalamientos contundentes sobre la falta de transparencia, imparcialidad y legalidad en el proceso. Además, recordó que tanto Naciones Unidas como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos expresaron su preocupación por la reforma judicial y su incompatibilidad con estándares internacionales de independencia judicial.En este contexto, la iniciativa presentada plantea que si en la elección de ministros de la Suprema Corte no se alcanza el 40% de participación ciudadana, el resultado sea declarado inválido y se convoque a una segunda vuelta. La propuesta, de aprobarse a nivel local, sería turnada al Congreso de la Unión para su eventual discusión y aprobación.“No más fraudes, no más imposiciones. Que la voluntad ciudadana no sea manipulada ni usada como instrumento de simulación democrática”, concluyó la diputada.