IRREVERENTE
Por Andrés Timoteo
AQUEL PILLAJE
Ahora que está la expectativa por la tormenta tropical Karl que tocará tierra en las próximas horas y posiblemente sea en Veracruz hay que ejercitar la terca memoria pues hace doce años un huracán con el mismo nombre azotó la entidad y también sirvió de pretexto para perpetrar un pillaje monumental. El millón de damnificados que en aquel 14 de septiembre del 2010 todavía sigue esperando la ayuda oficial que nunca llegó, y no lo hizo porque se robaron el dinero.
Fue, quizás, el hurto más grande en la historia de Veracruz que se cometió de una sola tajada, a vista de todos y con muchos cómplices de los cuales algunos siguen vigentes en la política local. El pasado 3 de octubre se cumplieron doce años de que los diputados del congreso local autorizaron al innombrable para adquirir préstamo por 10 mil millones de pesos bajo el argumento de que se utilizarían para apoyar a los damnificados del ciclón Karl y también del huracán Mathew, ¡que ni siquiera tocó Veracruz!, y se convirtieron en copartícipes del robo.
¿Quién era el lider de la legislatura que maniobró para darle al innombrable ese botín de 10 mil millones de pesos apenas dos meses antes de que dejara el gobierno y sin ningún mecanismo de fiscalización para verificar que en realidad fuera usado en ayudar a la gente y reparar los daños materiales? El priista Héctor Yunes Landa, ese que ahora quiere nuevamente ser gobernador de la entidad -risas -. Yunes movió la ‘aplanadora’ tricolor en la legislatura para facilitar el hurto.
Fueron 28 diputados priistas que lo secundaron, algunos que siguieron vigentes en la política local como la boqueña Angela Perera – comadre de la exalcaldesa de Veracruz, la oaxaqueña Carolina Gudiño -, Ricardo Ruiz Carmona, también porteño y quien ahora anda de las redes sociales regalando dinero a la gente. Claro,es del peculio que se hizo cuando medró de los cargos públicos, o sea dinero de todos.
Igual el boqueño Raúl Zarrabal, el tuxtleco Manuel Rosendo, otro pillo de siete suelas que luego fue alcalde de San Andrés Tuxtla donde igualmente desvalijó la tesorería y Dalia Pérez, actriz de la película, “Chiles Jalapeños”, exnovia del entonces rector de la Universidad Veracruzana, Raúl Arias Lovillo y luego funcionaria en el gobierno de Javier Duarte.
También para la memoria colectiva es que hubo legisladores de “oposición” que votaron a favor y algunos de ellos hasta se subieron a la tribuna para defender que el innombrable obtuviera esos miles de millones con discursos incendiarios en nombre de los “hermanos que están damnificados y necesitan nuestra ayuda que no se la podemos negar, seríamos irresponsables en no autorizar ese préstamo que salvará vidas y reparará las afectaciones”, dijeron, palabras más, palabras menos, en sus alocuciones.
Los más zalameros fueron el fortinense Alfredo Tress Jiménez, entonces dirigente del partido Convergencia por la Democracia -hoy Movimiento Ciudadano – y el perredista Manuel Bernal Rivera. El primero, Tres Jiménez, casi se desgreña con Sergio Vaca por defender al innombrable y tratar de impedir que el abogado porteño usara la tribuna para hablar en contra del préstamo.
“Seríamos insensatos, seríamos insensibles (si no aprobamos el préstamo)”, dijo e incluso aludió a Dios para incitar a que los otros legisladores apoyaran la entrega de esos 10 mil millones de pesos al gobernante. En tanto, Bernal Rivera aseguró que había “caminado por toda la entidad después del pasó del huracán” y “he constatado la devastación” cuando en realidad nunca salía del Café de la Parroquia en Jalapa donde radica.
Anunció el voto de los perredistas a favor para “contribuir de manera significativa a que nuestros paisanos damnificados puedan recuperar sus hogares, su patrimonio y devolverles la esperanza”. Pero solo ayudó a que el entonces mandatario aumentaran su patrimonio personal con dinero público y timando a los damnificados. Ni Tress Jiménez ni Bernal Rivera volvieron a hablar del tema después ya que estaba confirmado que el dinero nunca llegó a los afectados.
EL “HURACÁN FIDEL”
Los panistas también fueron cómplices de ese hurto. Tres de ellos subieron a la tribuna a defender el pillaje, no olviden sus nombres porque ahora ellos se dicen “opositores” y denunciantes de la corrupción. Uno fue el porteño Marco Antonio Núñez, apodado “El Choriqueso”, otro el sureño Federico Salomón actual dirigente estatal del blanquiazul y José Mancha, también exdirigente del mismo partido. Este último anunció el voto de la bancada panista alegando que “no queremos un Veracruz en ruinas”.
¿Y qué pasó? Veracruz siguió en ruinas, el innombrable salió más rico de su sexenio y los panistas tampoco volvieron a hablar del asunto a pesar de que fue evidente el fraude. El único diputado que se opuso a la autorización del crédito, denunció la corrupción de la fidelidad y anticipó que los 10 mil millones de pesos se los robarían fue Sergio Vaca Betancourt, conocido en el puerto como “el abogado de los pobres”.
Vaca no solo exhibió al fortinense Tress Jiménez por haber recibido ‘moches’ del gobierno fidelista para abogar por ese préstamo como lo había hecho con el proceso de la bursatilización del Impuesto a la Tenencia Vehicular sino que acuñó una frase memorable por la comparación tan certera: “¿Desde cuándo falta dinero (en Veracruz)?, no es por los huracanes Stan y Karl. El peor huracán que devastó a Veracruz, porque se llevó todo, es el huracán Fidel”.
“Se están aprovechando del dolor ajeno, yo prefiero ser calificado como rebelde, incrédulo y suspicaz que como tonto o vendido. No están aquí para ayudar a una persona que ha abusado y que a lo largo y a lo ancho de Veracruz se llevó lo que pudo”, expuso apelando a la consciencia de los otros diputados. Todo eso consta en el acta de la sesión celebrada en la 61 Legislatura aquel 3 de octubre del 2010 y cualquiera que consulte la hemeroteca parlamentaria lo puede verificar.
A doce años de distancia, cada palabra del abogado Vaca se cumplió al pie de la letra. Fue el robo monumental a vista de todos, a nombre de los damnificados por los huracanes, con la anuncia de priistas, panistas, perredistas y convergentes, y cometido menos de dos meses de que el innombrable se fuera de palacio de gobierno. Que ningún veracruzano lo olvide.