TEXTO IRREVERENTE

ANDRÉS TIMOTEO

LE GANARON A SINALOA

Tres personajes del morenismo en Veracruz están insertando gacetillas en los espacios de opinión y las redes sociales para atribuirse el ‘éxito’ en la consulta para la revocación del mandato presidencial del pasado 13 de abril. Los que se pelean por agenciarse la hazaña son el diputado tuxtleco Javier Gómez Cazarín, presidente de la Junta de Coordinación Política en el congreso local, en dupla con el dirigente del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Esteban Ramírez, y el secretario de Gobierno, Patrocinio Cisneros Burgos.

Ellos se atribuyen los distritos que arrojaron los resultados más abultados. También el secretario de Educación, Zenyazen Escobar se promociona como un operador de resultados exitosos del revocatorio en Córdoba y Orizaba, aunque con menos estridencia, por lo que el jaloneo está entre los tres primeros. Y es cierto lo que presumen pues en los territorios bajo su encargo lograron una participación muy superior al promedio nacional que fue del 17.7 por cierto.  Vaya, en algunos distritos duplicaron esa cifra.

¿Son unos súper-operadores?, ¿unos magos del artificio electoral?, ¿o líderes tan carismáticos que la gente los sigue y les obedeció a ciegas cuando pidieron ir a “ratificar” a López Obrador?  Para nada, lo obtuvieron con las viejas mañanas de la ‘mapachería’  electoral: comprando votos , chantajeando a los beneficiarios de los programas gubernamentales, amenazando y presionando a muchos ciudadanos, obligando a los transportistas al ‘acarreo’ masivo y otras ilegalidades.

Sin embargo, lo anterior no fue suficiente y tuvieron que recurrir a cosas más perversas. Atrás del “éxito” que lograron Cisneros, Gómez Cazarín y Ramírez Zepeta hay algo turbio que ya está siendo material de análisis por los expertos. Una pista de lo que pasó en muchos estados del país donde la participación fue extraordinaria – Veracruz tuvo el 26.8 por ciento y se colocó en el cuarto lugar más alto-, la acaba de dar  Anabel Hernández en una entrevista en el noticiero de Carmen Aristegui.

La periodista Hernández, especializada en temas del crimen organizado, dijo que las estadísticas del Instituto Nacional Electoral (INE) muestran algo tan indicativo como peligroso y “que debe encender todas las alertas rojas” pues las organizaciones delictivas movilizaron gente a votar en esa consulta para ayudar al partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y a sus gobiernos locales.

Al igual que en las elecciones del 2021, ahora en el revocatorio todo apunta a que hubo un apoyo de los cárteles del narcotráfico en simbiosis con los operadores morenistas. ¿Cómo saberlo o cómo distinguir en qué lugares sucedió eso? Anabel Hernández señaló que el primer gran indicador es que en algunos estados y distritos se rebasó y hasta se duplicó el promedio nacional de participación, y hubo casillas donde salieron más votos que electores. Ahí, el fenómeno del ‘acarreo’ no solo lo hicieron los políticos, sugirió.

Puso como ejemplo lugares de Oaxaca, Chiapas, Sinaloa y hasta la Ciudad de México donde fue más que evidente la participación del crimen organizado, pero no solo ahí sino que también en otras entidades se dio ese fenómeno que debe ser investigador, documentado y denunciado. Claro que la periodista no anda equivocada y todo lo que dice encaja perfectamente con lo acontecido en Veracruz con ese millón 585 mil votos que se obtuvieron y que no tienen un origen transparente.

Desde el mismo domingo corrió la información de que hubo casillas de donde salieron más votos que los ciudadanos inscritos en el padrón y ya no se diga del ‘acarreo’ desbocado que hicieron de votantes. Además, si se analizan los datos pormenorizados de algunos distritos las sospechas se elevan. Por ejemplo,en Cosamaloapan, de donde es originario Cisneros Burgos hubo una participación de 39. 22 por ciento, más del doble que la media nacional.

En San Andrés Tuxtla y Cosoleacaque donde operaron Gómez Cazarín y Ramírez Zepeta, la participación fue del 24.85 y 36.79 por ciento, respectivamente, y en Pánuco donde mandan los grupos caciquiles liderados por las familias Guzmán de Paz y García Escalante, aliados de Morena, se llegó a 34.98 por ciento. En pocas palabras, se les pasó la mano porque no solo rebasaron la media nacional sino que -solo para citar el ejemplo del estado con más intervención del crimen organizado -dejaron muy atrás a Sinaloa, la tierra del Cartel de Sinaloa.

Allá, la participación  fue del 19.22 por ciento y en el llamado “Triangulo Dorado” donde se ubica Badiraguato, la tierra de Los Chapos y donde en algunas casillas colocaron mantas con la leyenda: “amor con amor se paga” en referencia a la gratitud para con el tabasqueño López Obrador, fue del 22 por ciento. Y ¡pum!, en los distritos veracruzanos encargados a Patrocinio Cisneros, Javier Gómez Cazarín y Esteban Ramírez ‘dobletearon’ a los sinaloenses-.  Tanto rebosaron el plato que el asunto apesta a lo que denuncia la periodista Anabel Hernández.

“EL CHAPITO” AMOROSO

Tampoco hay que perder de vista al distrito de Tantoyuca donde hay otro clan que ayudó al morenismo, pero no del crimen organizado aunque el líder del mismo sea homólogo del capo sinaloense. Se trata del grupo caciquil que comanda el panista-marrón Joaquín Guzmán Avilés, apodado “El Chapito”,  quien movilizó a sus huestes del norte veracruzano para meter  votos en el revocatorio y alcanzar un 32 por ciento de participación. Tantoyuca junto con Cosamaloapan, Cosoleacaque y Pánuco fueron los cuatro distritos más concurridos.

Guzmán Avilés respondió así a las atenciones del cuitlahuismo que patrocina su candidatura a la reelección en el Comité Directivo Estatal de Acción Nacional y que para allanarle el camino primero encarceló a su contrincante, Tito Delfín Cano, y luego maniobró para que el Tribunal Electoral de Veracruz anulara la elección interna que había perdido frente al sureño Federico Salomón.

El famoso “Chapito” ya cumplió con votos y porcentajes en la consulta del domingo movilizando al padrón azul que controla en aquella región y ahora está a la espera que eso mismo -votos, ‘acarreo’ y financiamiento – se lo regrese palacio de gobierno para el 8 de mayo cuando se realicen las elecciones extraordinarias de su partido. “Amor con amor se paga”, dicen también Los Chapos de Tantoyuca.