TEXTO IRREVERENTE

ANDRÉS TIMOTEO

ESQUELETOS EN EL ARMARIO

Son ‘esqueletos en el armario” que tarde o temprano saldrán para asustar a sus verdugos. El cordobés José Manuel del Río Virgen y el carrancista Pasiano Rueda Canseco llevan en prisión seis y ocho meses, respectivamente, a capricho del gobernante en turno, Cuitláhuac García y del secretario de Gobierno, Patrocinio Cisneros quien maneja los hilos de la Fiscalía General por medio de su recomendada, Verónica Hernández.

En el primero caso  si bien estiraron tanto los tiempos legales para mantenerlo encarcelado ya se toparon con pared. El Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Séptimo Circuito ratificó el amparo a su favor para que sea liberado, mismo que obtuvo desde enero pasado pero que a nivel local se negaron a acatar, pero ahora lo tendrán que hacer.

Todas las acusaciones hechas en contra de Del Río se ‘cayeron’ ante la revisión federal. La principal,  que era el autor intelectual del asesinato de Remigio Tovar, candidato del partido Movimiento Ciudadano a la alcaldía de Cazones de Herrera, ni siquiera la pudo sostener la fiscala Hernández Giadáns y el juez local dictó prisión preventiva por consigna, no por legalidad. 

Del Río Virgen es el cause donde descargan su enojo García Jiménez y Cisneros Burgos porque el senador Ricardo Monreal intervino a favor de los seis jóvenes detenidos en Jalapa en septiembre del año pasado por ultrajes a la autoridad y demostró judicialmente que todo fue un tinglado para proteger al secretario particular de Cisneros, un tal Jorge Chávez. quien se vio involucrado en un accidente vial con los muchachos y se negó a pagar los daños, y además les fabricó un delito con la complicidad de la policía estatal, la Fiscalía y los jueces locales.

Ese armado lo tumbó Monreal que logró la libertad de los jóvenes en diciembre y evidenció la ‘chicanadas’ legales y el abuso de autoridad del gobierno cuitlahuista. Por eso encarcelaron a del Río, quien era secretario técnico del Senado, para vengarse políticamente del zacatecano. Ayer Monreal visitó nuevamente a Del Río en el penal de Pacho Viejo y desde ahí mandó un mensaje a quienes gobiernan en Veracruz:

El preso político quedará libre y se exhibirá la perversidad, las graves desviaciones y la ominosa persecución política de la Fiscalía local, del sistema judicial de la entidad y a los funcionarios estatales. ¿Quién reparará el daño causado?, cuestionó el legislador, y sí fue pregunta, pero se entendió como anticipó de las contra-demandas que vendrán. En resumen, ese ‘esqueleto’ está por salir del armario para ‘jalarles las patas” a los cuitlahuistas.

Y los pleitos más feroces siempre son entre parientes– los abuelos del pueblo dirían que “cuando la perra es brava, hasta los de casa muerde” -pues Ricardo Monreal es senador por Morena y miren como lo tratan los morenistas de la aldea. Lo mismo que sucede con el alcalde electo de Jesús Carranza, Pasiano Rueda quien está encarcelado desde octubre del año pasado a pesar de ser militante del Partido del Trabajo (PT) un aliado de Morena.

Su caso es extraordinario pues  aun tras las rejas volvió a competir virtualmente como candidato a la alcaldía en marzo y le ganó al candidato morenista. Ahora la venganza sigue y no lo dejarán salir para que pueda rendir protesta el primero de julio. Luego de que familiares de Rueda abordaron la semana pasada al presidente Andrés Manuel López Obrador en el sur del estado para acusar al gobernador García de mantenerlo como preso político, desde Jalapa intensificaron la campaña de acusaciones en su contra.

García Jiménez le acaba de poner nombre al supuesto cómplice mafioso de Rueda Canseco afirmando que es un tal “Vani”, capo de la Familia Michoacana.  Claro, eso y la Carabina de Ambrosio es lo mismo pues el gobernante tiene la manía de lanzar acusaciones y recitar apodos de jefes criminales para trasladarles sus pifias y los delitos cometidos en su propio entorno o  difamar a los que considera sus enemigos políticos, no importa que se trate de niños, mujeres, ancianos, minusválidos o inocentes todos.

Va creciendo su repertorio de ‘chivos expiatorios’ que luego ni aparecen, no existen o no tuvieron nada que ver con los hecho imputados.  Ahí está el “Wester” de La Patrona, en Amatlán de los Reyes; la “Loca” de Coatzacoalcos; el “Mara” de Cosoleacaque  y ahora se sacó de la chistera a el “Vani” de Jesús Carranza. Puros nombres inventados en la fábrica de historias y manufacturera de culpables en que se convirtió la Fiscalía veracruzana.

Los abogados de Rueda  afirman que al igual que el caso de Del Río Virgen, la fiscalía no ha presentado ninguna prueba sólida -más que díceres – de que el petista tenga nexos con el crimen organizado. Es otro ‘esqueleto’ en el armario que les puede dar un susto si se hace valer el estado de Derecho.

ONG TLACUACHE

Cierto, el gobernante Cuitláhuac García miente como respira, pero algunas veces dice la verdad y eso hay que consignarlo. Ayer reveló algo que ya había sido desliado por trabajadores del Acuario y del mismo gobierno estatal -que no son funcionarios-: la organización seudo ambientalista “Earth Mission” intentó extorsionar al Ejecutivo con contratos y cargos en dicho centro recreativo a cambio de parar con las denuncias en contra de su administración. O sea, el dirigente de esa agrupación, un tal Sergio Sergio González, exigió ‘moches’ del presupuesto público.

Dedicada a rescatar tlacuaches en la zona conurbada, ““Earth Mission” siempre se ha prestado a fines político-partidistas. En su momento se lanzó contra una empresa constructora a petición de los nuevos riquillos de un fraccionamiento en la llamada Riviera Veracruzana, antes fue contra el gobierno de Boca del Río, de extracción panista, por la construcción del “Foro Boca” cuando el duartismo los financiaba y ahora se treparon al tema de la intervención del Acuario a fin de sacar raja monetaria.

García Jiménez exhibió ayer a sus líderes como chantajistas que usan la causa ecologista y les azotó las narices con la puerta del ‘Aquarium’ donde quería hacer negocio. Bochornoso asunto pues en el 2018 esos mismos liderecillos se sumaron a la causa morenistas y eran férreos detractores del yunismo, pero ahora no solo los batearon sino que los exhibieron. Se confirma el dicho de los abuelos: cuando la perra es brava, hasta los de casa muerde.