ANDRÉS TIMOTEO
LA LEY DE HERODES
Que nadie se vaya con la finta. Los maleantes que agitan el pandero en el municipio de Sayula de Alemán ahora pretenden que la opinión pública tenga la percepción de que hay ingobernabilidad y engrosar su exigencia de desaparecer poderes e instalar un concejo. Ahora, con el pretexto de que el personal que labora en el ayuntamiento tiene varias quincenas sin cobrar, mandaron a los empleados a bloquear las oficinas.
Luego prepararon un ´grupo de choque’ para enfrentarlos y generar el caos. Son demasiado burdos. El supuesto conflicto lo generó la misma familia caciquil que despacha en un rancho ganadero de las afueras de la localidad y que busca hacerse con el control del ayuntamiento y obligar a renunciar a la alcaldesa Lorena Sánchez.
El 7 diciembre fue detenido Rafael González, tesorero impuesto por los mismos tipos, y su cargo no ha sido cubierto. Los maleantes azuzaron al cabildo para impedir que la munícipe colocara a un sustituto ajeno a sus intereses y desde entonces se bloquearon los recursos para cubrir las actividades administrativas. Todo fue un plan con maña. Los burócratas no pudieron cobrar y la culpa se la echaron a Sánchez Vargas preparando el escenario para un zafarrancho que se dio ayer lunes.
Ya a principios de este mes el síndico Bartolo Grajales y los regidores Alicia García, Abimael Merino, Zoila García y Juan Manuel Symor anunciaron que estaban dispuestos a renunciar -vaya ignorantes pues los cargos de elección popular son irrenunciables – a cambio de que también fuera destituida Sánchez Vargas. Fue una primera intención de presionar a los diputados para decretar la extinción del cabildo.
Es la lógica de los pillos: nada para nadie. ¿Y su nieve de qué sabor la querrán? Tanto el gobierno estatal como los integrantes del congreso local deben evitar caer en el garlito de eliminar a una autoridad que fue votada en las urnas. Jurídicamente no hay sustento para decretar la extinción del ayuntamiento y nombrar a un concejo municipal.
Todo es parte de un plan para seguir expoliando los recursos públicos por personas ajenas al ayuntamiento y a la legalidad. En agosto del año pasado, parte del cabildo intentó tomar por la fuerza a la alcaldía pues sesionó de forma ilegal y votó por la destitución de Sánchez Vargas, algo totalmente inconstitucional.
Más burdos no pudieron ser pues también designaron al síndico Grajales Lagunes como presidente municipal sustituto –algunos lo llaman el ‘cínico’- y que el regidor Abimael Merino subiera a la sindicatura. Hasta parece la trama de la película “La Ley de Herodes” con su Juan Vargas – el ‘cínico’ Grajales- destrozando la Constitución para autonombrarse alcalde.
¿Cómo la ven? El peón de los caciquillos locales quiere ser munícipe a la fuerza cuando debería estar frente a un juez rindiendo declaración por sus ilícitos y por formar parte de una conspiración del crimen organizado a fin de tomar por asalto a un ayuntamiento y destituir a una alcaldesa que fue electa constitucionalmente.
ELLAS SE JUNTAN
La folclórica diputada local, Lidia Mezhua Campos, pide a los ciudadanos no salgan por las noches a fin de que no se conviertan en víctimas de la violencia, que se queden en sus casas para no ponerse en riesgo. Esto lo dijo en el contexto de la marejada de violencia -muertos, balazos, desapariciones, policías ejecutados y demás – que padeció la zona centro durante la semana pasada.
Ni por equivocación la exalcaldesa de Zongolica habló de la ineficacia de las autoridades para contener y sobre todo para prevenir esos actos violentos. No, la receta de la legisladora es que la gente se cuide sola atrincherándose en sus domicilios. Nada más le faltó agregar que se “compren un perro” como decía el exsecretario de Seguridad Pública en el duartismo, Arturo Bermúdez.
Mezhua Campos es un ‘botón de muestra’ de los fallidos representantes populares que ni sufren ni se solidarizan con las víctimas de la violencia, al contrario son frívolos e indolentes ante el padecimiento ajeno. ¿Qué ha hecho esta diputada en más de un año de estar sentada en la curul estatal? Nada, salvo comprarse una camioneta de lujo de casi un millón de pesos con la que se pasea por la serranía.
Sus declaraciones recuerdan a las que en enero del 2019 emitió su homóloga de Jalapa, Ana Míriam Ferráez al proponer un ‘toque de queda’ para que las mujeres veracruzanas fueran víctimas de feminicidio. Mezhua y Ferráez, ambas diputadas, ambas banales, ambas de Morena. “Dios las hace y ellas se juntan”, reza el dicho popular.
BAJO ACOSO
La periodista Silvia Núñez lleva tiempo bajo acoso de la duartista Diana Santiago Huesca, delegada regional de la SEV en el puerto de Veracruz. La funcionaria, famosa por sus actos de corrupción, ahora formó un grupo de ataque para que exija el despido de la comunicadora.
Como legalmente no puede cesarla pues Núñez no ha cometido ninguna falta laboral mandó a su mesnada que lidera un tal Jorge Manuel Larrainza King para difamarla en manifestaciones hechizas. ¿Cuánto faltará para que Huesca ordene a esos agitadores que agredan físicamente a la reportera? Poco.
Le es muy incómoda porque ha documentado sus bellaquerías en la dependencia y por eso alista el escenario para que sea atada en su persona misma. Esa es la pretensión de la duartista Huesca. Y mientras tanto los integrantes de la Comisión de Protección -risas- a Periodistas peleándose por cómo van a repartirse el presupuesto de este año.
Queman su tiempo -pagado con el erario – discutiendo sobre si es o no censura a la libertad de expresión que se le apagó la conexión web a una de sus comisionadas durante una sesión telemática. Estos tipos no tienen compostura: les da fatiga sesionar presencialmente. A su vez, el secretario Zenyazen Escobar tolera a la represora delegada permitiéndole que hostigue permanentemente a una periodista. Aquí también, entre Escobar y Huesca, es válido eso de que ‘Dios los hace y el diablo los junta’.