TEXTO IRREVERENTE

ANDRÉS TIMOTEO

DE PADRE A PADRE

El discurso de la  austeridad franciscana y la incorruptibilidad a prueba de todo del presidente Andrés Manuel López Obrador quedaron despostillados con el reportaje de la “Casa Gris” de su primogénito José Ramón López Beltrán. El mandatario reaccionó furioso contra el mensajero para distraer la atención sobre el mensaje. Lleva tres semanas atacando al periodista Carlos Loret de Mola con el aparato de Estado, algo reprobable en una democracia y sí muy típico de los regímenes despóticos.

Ante la andanada, don Rafael Loret de Mola, padre del reportero, salió a la palestra para defenderlo. Con todo su prestigio y autoridad moral que lo caracteriza por ser un cronista excepcional del poder y férreo crítico de los últimos seis presidentes, don Rafael sintetizó: “Ya quisieras tú tener un hijo como el mío del que me enorgullezco profundamente porque ha seguido los pasos de un padre que siempre ha defendido su derecho a la libertad de expresión y ha cuestionado severamente a los regímenes que le ha tocado vivir”.

“Me solazo al pronunciarlo y al decirlo, tengo algunas discusiones con él (Carlos), pero nadie me va a quitar el orgullo de ser su padre, de haber incidido en su formación periodística y de que sea en este momento el principal contrapeso para los abusos de poder que tu estás haciendo, aseveró palmeando el pecho.

Loret, el hijo, con su reportaje puso en evidencia la falsedad del tabasqueño cuando recomienda a los mexicanos no ser aspiracionistas y conformarse con un par de zapatos cuando su hijo vive mansiones y maneja camionetas de lujo en Estados Unidos sin que se le conozca empleo alguno. Además lo toca el tufo de la corrupción pues López Beltrán y su esposa, quien es cabildera de empresas petroleras, ocuparon una casa propiedad del ejecutivo de un corporativo transnacional  que recibió contratos millonarios de Pemex al mismo tiempo que hospedaba al hijo y a la nuera presidenciales.

Es, por supuesto, un conflicto de intereses y eso es corrupción plena y llana. De ahí la furia de López Obrador contra el periodista al que busca desprestigiar en un intento de restar impacto al reportaje, algo  que no ha logrado. La ‘bestia negra’ está herida y da coletazos, reza un clásico en la teoría política. El término “bestia negra” no es peyorativo sino superlativo, usado por los teóricos para referirse a los personajes de gran trayectoria e influencia en la política.

Los coletazos ahora son contra un periodista y eso debe prender las alertas a todos. Nadie debe tolerarlo porque ahora es Loret de Mola y luego serán otros. Peligroso es también que los funcionarios de nivel inferior son sus imitadores y con esto se considerarán autorizados para atacar, injuriar y agredir a reporteros y a las empresas periodísticas. Vendrá la ley de la selva contra la libertad de expresión.

Don Rafael Loret de Mola no se anduvo por las ramas y ofreció disculpas a sus lectores y al pueblo por haber sido cercano en un tiempo a López Obrador. “Me avergüenzo profundamente de haberte tendido la mano muchas veces, me avergüenzo de haber sido tu amigo y de haber creído en ti”. Y el epitafio de su pronunciamiento fue una verdad que siempre acompaña a los que ejercen el periodismo y que llega con el tiempo:

“Si se nos presta vida, al termino de tu mandato, ya no falta mucho, ya rebasaste el cenit de tu gobierno, yo voy a seguir siendo periodista igual que mi hijo y tu ya no vas a seguir siendo presidente. Vas a ser solo un hombre repudiado por la historia que te tratará muy mal”.

¿TOQUE DE BOLA?

¡Cuiden sus carteras que ahí viene ‘El Carón’!, recomendaron los burlones en la zona centro. En efecto, al diputado tuxtleco Javier Gómez Cazarín, dueño de ese apodo, se le vio por Córdoba a finales de la semana pasada. Dijo que realizaba una “visita de cortesía” al ayuntamiento, aunque aparentemente solo se reunió con la síndica, Vanía López, quien fue su empleada en el congreso local.

Y esa visita desató muchas especulaciones por el actual contexto político y porque el popular “Carón” no da ‘paso sin huarache’. Es decir, no hace “visitas de cortesía” sino hay botín que sacar. Una esas especulaciones tiene que ver con lo que ya ha hecho en varios ayuntamientos desde el cuatrienio pasado, que la obra pública la acaparen empresas constructoras recomendadas por él, la cuales los bien enterados afirman que son suyas pero las manejan prestanombres.

Se trató, dicen, de la avanzada para maniobrar a fin de que los nuevos alcaldes tanto morenistas como de otros partidos entreguen los contratos de obra pública a determinadas empresas constructoras recomendadas por él. En pocas palabras, vino anunciales que les aplicará el “cobro de piso” como hacen los del crimen organizado. Y no solo estuvo en Córdoba sino también habría recorrido otros municipios principalmente los que manejan los presupuestos más abultados como Córdoba, Fortín de las Flores, Amatlán de los Reyes y Huatusco.

La segunda versión sobre las visitas que Gómez Cazarín hace a los alcaldes es que está tratando de ganarse su respaldo para eventualmente darle un ‘pinochetazo’ a Patrocinio Cisneros actualmente debilitado por los escándalos que lo ligan con el crimen organizado y las pifias de la Fiscalía General de Justicia donde opera su recomendada, Verónica Hernández Giadáns.

En los últimos días se ha manejado la especie de que el legislador tuxtleco quiere convertirse en el secretario de Gobierno y para eso está recaudando apoyos. Hace una semana también se le vio de “visita de cortesía” en el Senado de la República para reunirse con los dos senadores morenistas por Veracruz, Gloria Sánchez y Ernesto Pérez, también con la misma intriga.

El resumen es que el tuxtleco andaría en maniobras para que echen a Cisneros Burgos y él ocupe el cargo. La versión ha escalado tanto que el propio tuxtleco salió a la prensa el martes pasado a negar dicha grilla. “Yo no quiero su puesto, estoy para apoyarlo siempre y cuando sea para beneficio del pueblo” dijo en la gacetilla insertada en algunos portales digitales.  Es más, reiteró que con Cisneros lo une “total cordialidad y amistad” y que su trabajo – de él, Gómez- está en la legislatura. Ajá. Al parecer el popular “Carón” ya olió la debilidad de Patrocinio Cisneros y quiere dar ‘toque de Bola’.