TEXTO IRREVERENTE

ANDRÉS TIMOTEO

CONSULTA DUERME TARIFA

Ya miles de usuarios se preparaban para el sablazo en la extendida ‘cuesta de enero’ cuando vino el revire gracias a la conveniencia política. La Secretaría de Comunicaciones y Transportes canceló de último momento el aumento de la nuevas tarifas para las autopistas que administra Caminos y Puentes Federales (Capufe) y que entrarían en vigor el miércoles. Era un golpe puro y duro a la economía de todos: automovilistas particulares, empresarios transportistas, comerciantes, concesionarios de autobuses de pasajeros y turísticos, y de ahí para abajo.

Según la paraestatal se trataba de un incremento del 7.36 por ciento al costo actual de los peajes, pero se decidió suspender “hasta nuevo aviso” la actualización tarifaría. ¿El motivo? El presidente Andrés Manuel López Obrador está en campaña pues el próximo 10 de abril se someterá a la consulta de Revocación de Mandato. Y aunque  se prevé que la asistencia sea escasa y solo acudan a votar -en ‘acarreo’ – todos los beneficiarios de los programas sociales, se quiere evitar un susto.

No vaya a ser que el zarpazo económico pudiera azuzar el enojo en la clase media -que de entrada sería la que más resentiría  el tarifazo- y ésta se decidiera castigar al tabasqueño con una opinión negativa como lo hizo en la Ciudad de México en las elecciones de año pasado. Es la misma estrategia que implementaban priistas y panistas cuando estaban en el poder, cada año electoral no aplicaban nuevos impuestos ni elevaban el costo de los servicios públicos. Ahora los morenistas la repiten y ya cuando pase el 10 de abril y López Obrador esté ratificado, entonces sí: ‘ábranla piojos que ahí les va el peine’ dirían en la colonia.

En Veracruz hay cinco autopistas bajo cuota y veinte casetas para cobrarla, las que opera Capufe pues no se consideran las concesionadas a empresas privadas. En la zona centro, por ejemplo, del tramo Esperanza-Ciudad Mendoza el costo subiría de 37 a 40 pesos para motocicletas, de 75 a 80 pesos para automóviles, de 159 a 171 para autobuses y de entre 158 y 421 a 170 y 451 pesospara camiones dependiendo de la cantidad de ejes.

De Ciudad Mendoza a Córdoba pasaría de 17  a 18 para motos, de 34 a 36 para autos, dde 86 a 92 para autobuses y de  entre 71 y 187 a entre 76 y 201 para camiones. De Ciudad Mendoza a Fortín se elevaría  de 7 a 8 pesos para motos, 15 a 16 para autos, de 46 a 49 para autobuses y de entre 44 y 107 a entre 95 y 114 para camiones. En la autopista Córdoba-Veracruz la tarifa montaría de 114 a 122 para motos, de 229 a 245 para automóviles, de 335 a 359 para autobuses y de entre 229 y 485 a entre 347  a 520 pesos para camiones.

La autopista Tihuatlán-Gutiérrez Zamora, en la zona norte de la entidad, elevaría el peaje de 24 a 25 pesos para motos, de 48 a 51 para autos, de 98n a 105 para autobuses y de entre 83 y 187 a entre 89 y 201 para camiones- Y de Las Choapas a Ocozocoautla, al sur del estado, subiría de 126 a 135 para motocicletas, de 255 a 273 para automóviles, de 462 a 498 para autobuses y de entre 390 y 840 a entre 420 y 903 para camiones. Todo ese subidón se puso a dormir por mientras.

LOS TONTOS DEL PUEBLO

En este tema no hay que olvidar que el gobernante en turno, Cuitláhuac García engañó a todos con la promesa de que gestionaría el retiro de las casetas de peaje en Fortín de las Flores y de La Antigua que comunica al puerto de Veracruz con Jalapa. A mediados de junio del 2018, en plena campaña electoral para la gubernatura, lo anunció varias veces en su giras por Córdoba y la región fabril de Orizaba. También lo hizo en sus recorridos en la zona costera y en la capital del estado.

El 24 de agosto de ese año, ya como gobernante electo, se lo reiteró a los  integrantes de la Asociación de Industriales del Estado de Veracruz (Aievac). “Se va a hacer de manera inmediata porque además fueron compromisos con la población durante la campaña”, les dijo tras afirmar que Morena, su partido, iba a ser gobierno estatal y federal, además tendría la mayoría en el congreso local y en la Cámara de Diputados. Sería cosa de tronar los dedos, presumió.

En la primera quincena de diciembre, ya en la gubernatura, García Jiménez se reunió con integrantes de  la Confederación Nacional de Cámaras de Comercio (Concanaco) a los que les aseguró que ya había  gestionado la eliminación de ambas casetas. “En el 2019 se van”, les juró.  “Y nosotros le creímos porque nos dio su palabra”, expresó Mario Ríos Alvarado presidente de la Canaco-Orizaba.

Transcurrió todo ese año y las casetas de cobro ahí continuaron. El 8 de marzo del 2020 cuando acudió a Mixtla de Altamirano para entregar un centro de salud García Jiménez volvió a prometerlo: “Hicimos un compromiso, ya hablamos (con la SCT) sobre la viabilidad y nos dijeron que sí la vamos a mover,  van a quedar totalmente fuera”.

Según sus dichos, acordó con los entonces titulares de las secretarias de Comunicaciones y Hacienda,  Javier  Jiménez Espriú y Carlos Urzúa, respectivamente, que se retirarían ambos peajes. “Se van por que se van”, afirmó. Pero a partir de esa fecha todo fue silencio, no volvió a tocar el tema y solo mandó a su secretario de Finanzas, José Lima Franco a declarar en algunas entrevistas que era inviable eliminarlas por cuestiones de ingresos. Nunca gestionó nada, pues.

Respecto a la primera -la de Fortín- bien pudo convencer al presidente López Obrador para quitarla pues dicho tramo depende del gobierno federal. No lo hizo. En el caso de La Antigua fue mentira desde el inicio pues la misma no la opera  Capufe sino que está concesionada a 63 años por una empresa privada y por ende es casi imposible cancelar el contrato. Aun sabiendo eso, García Jiménez hizo la promesa como candidato, la machacó como gobernador electo y la repitió  durante sus primeros meses de mandato.

Mintió todo el tiempo. Aquellos que le creyeron, sobre todo los empresarios de ramo de transporte, quedaron como los tontos del pueblo porque los engatusó para que le dieran el respaldo en el periodo electoral. Les pasó  igual que aquellos empresarios duartistas que hasta colocaron un reloj gigante en el zócalo jalapeño contando los minutos para que llegará Cuitláhuac García a la silla estatal y pues les prometió que les pagaría los adeudos. Otros ‘tontos útiles’.