El Senador Manuel Huerta celebró que la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, acepte que someterá su mandato a consulta la revocación de mandato, al igual que lo harán otros gobernadores, como el de Oaxaca, Salomón Jara o incluso la propia Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, y como en su momento lo hizo Andrés Manuel López Obrador.
Consideró que es “muy fácil ratificarse, como actualmente se encuentra prevista en la ley federal: Pide el 40% para la consulta y, para concretarse la revocación, se necesitan dos terceras partes de ese 40 por ciento”.
Y añadió: “Tendría que ser muy odiado alguien para que le revoquen el mandato. Esta figura jurídica es muy limitada, pero fue lo que aprobó la oposición”.
En este orden, dio a conocer que en diálogo con el Senador, Adán Augusto López, presidente de la Junta de Coordinación Política y con la presidenta de la Mesa Directiva del Senado, Laura Itzel Castillo Juárez, ha sido abordado el tema con el objetivo de materializar este ejercicio de democracia directa.
El ejercicio de consulta de mandato lo ha planteado, argumentó, “porque tengo también la misma capacidad por haber ganado la elección de senador de mayoría en Veracruz. Sin embargo no lo he querido hacer porque creo que el movimiento tiene diputados que lo deben de hacer”, puntualizó.
Respecto de que los senadores sean objeto de consulta, Huerta aclaró que los Senadores “no pueden aplicarse a los legisladores. Son órganos diferentes en composición y número. La revocación de mandato se aplica solo al Ejecutivo”.
“Porque imagínense a 500 diputados y 128 legisladores, cómo se les puede aplicar Sería más bien la desaparición del Congreso”, planteó.
Como senador de la República, expresó que se encuentra abierto a un ejercicio de rendición de cuentas. “Yo no tengo problema porque yo siempre me rijo por lo que el pueblo me manda, el pueblo me dice y estoy dispuesto a someterme a cualquier auditoría”.
Finalmente, el Senador del Pueblo señaló que lo importante es que la gobernadora de Veracruz haya manifestado su voluntad de que se aplique la ratificación de su mandato por parte del pueblo veracruzano, para lo cual el congreso local debe cumplir con armonizar su legislación con la federal.